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En 2020, asistimos a un salto masivo en la venta de comestibles por Internet. En pocas semanas, el sector alcanzó cifras inesperadas durante al menos cuatro años más. En un instante, lo que parecía un canal relativamente insignificante se convirtió en uno que los minoristas de comestibles simplemente no podían ignorar y, lo que es más, es probable que siga siendo una norma en los próximos años. Sin embargo, la recogida en tienda (hacer un pedido de comercio electrónico en línea y recogerlo en la tienda) ha sido y seguirá siendo uno de los principales métodos para satisfacer los pedidos en línea, ya que ofrece varias ventajas a las tiendas minoristas que buscan aumentar la fidelidad de los clientes y el tráfico de personas.
Los minoristas que intentan adelantarse a la curva ya han empezado a experimentar con métodos como la construcción de almacenes y la instalación de robots para satisfacer la creciente demanda, pero las previsiones de la demanda señalan que la recogida en tienda ha sido y seguirá siendo uno de los principales métodos para satisfacer los pedidos en línea, ya que ofrece varias ventajas. En primer lugar, permite utilizar la infraestructura existente: los grandes minoristas ya disponen de puntos de venta bien situados geográficamente en las principales ciudades, lo que permite acortar el plazo de entrega. En segundo lugar, permite a los minoristas mantener la flexibilidad y moverse con rapidez entre la realización de pedidos en la tienda y en línea, junto con los niveles de inventario en todo el país. Y, por último, encaja perfectamente con el enfoque omnicanal para desarrollar la satisfacción del cliente comprando donde y como quiera: "click and collect", recogida en la acera o en tiendas físicas.
A pesar de sus muchas ventajas, la preparación de pedidos en tienda es cara y afecta a la rentabilidad en un espacio ya de por sí competitivo, puesto que el coste de la preparación de pedidos está directamente vinculado a los honorarios por hora de trabajo, así como al riesgo de estanterías vacías y necesidades de reposición que pueden producirse debido a las tendencias del mercado y a parámetros imprevistos. Además, dado que la mano de obra es muy difícil de conseguir y retener, cada minuto dedicado a la preparación de pedidos cuenta. Sin embargo, hay una forma sencilla de mantener los costes bajos: optimizar el proceso de picking garantizando la disponibilidad de los productos en las estanterías de las tiendas y reduciendo la necesidad de sustitución y las ineficiencias de reposición.
Una media del 8% de los productos no están disponibles en las estanterías de las tiendas en un momento dado. Como resultado, los preparadores pierden gran parte de su tiempo buscando productos que simplemente no están en las estanterías o están mal colocados, o dedican tiempo a buscar sustitutos, lo que aumenta aún más el tiempo y el coste de la preparación de pedidos. De hecho, los preparadores de comestibles afirman que los casos de falta de existencias (OOS) son la principal razón que ralentiza el proceso de picking. Sin estos factores, los índices de preparación de pedidos serían algo que las tiendas podrían convertir en un proceso dos veces más rápido. Dado que la preparación de pedidos en la sala de ventas representa el 50% de los costes de ejecución, tiene un impacto sustancial en el balance final del pedido y a menudo marca la diferencia entre una cesta deficitaria y una rentable.
Trax ofrece soluciones que pueden ayudar a las marcas de CPG y a los minoristas a mejorar la disponibilidad en estantería (OSA). Trax Retail Watch utiliza algoritmos de visión por ordenador (CV) e inteligencia artificial para crear una versión digital de la tienda física con datos de apoyo en tiempo real e informa de la falta de existencias para que los minoristas tengan siempre plena visibilidad de los artículos que se están agotando y puedan reponerlos rápidamente. A su vez, es más probable que los encargados de la recogida encuentren rápidamente todo lo que necesitan sin enfrentarse al problema de que falten productos o tengan que buscar sustitutos. Trax Retail Watch también permite a los empleados de la tienda detectar rápidamente cualquier problema que surja en las estanterías sin tener que recorrer físicamente cada pasillo. Desde productos extraviados hasta cambios de precios y posibles existencias bajas, tener una visibilidad total significa que los encargados de las estanterías toman decisiones más informadas, de modo que los preparadores de pedidos se enfrentan a menos obstáculos, son conscientes del inventario real y mejoran significativamente sus índices de preparación de pedidos del producto correcto que tenían en mente. Un picking más rápido significa menores costes y, en última instancia, mayores márgenes para aumentar las ventas.
Otra solución es Trax Dynamic Merchandising (DMX) powered by FlexForce, que combina CV con una plantilla a la carta de personal de merchandising cualificado y muy flexible a las pocas horas de recibir una solicitud. La agilidad de Trax FlexForce, unida a la precisión y exhaustividad de los datos de los lineales, permite reponer rápidamente los productos y evitar la pérdida de un valioso tiempo de preparación de pedidos con artículos que no están disponibles.
Con más minoristas de comercio electrónico abarrotando el espacio en línea, la competencia es dura. ¿Quiere saber hasta qué punto los compradores de comercio electrónico se sienten frustrados por la disponibilidad en los estantes? Trax descubrió la raíz de este problema a través de un estudio en profundidad de los consumidores. Aprenda a abordar la felicidad del comprador al tiempo que controla los datos de ventas a nivel de tienda, impulsa un cumplimiento más rentable y se mantiene en la tabla de líderes con nuestro libro blanco: Ganar la carrera de los supermercados online.
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